Ayer vimos a Lina Ron, la dirigente política de extrema izquierda, como ella misma se identifica. vociferando contra sus aliados políticos del MVR y manifestando su obediencia sumisa a la palabra de Chavez, como si este fuera un Dios Comandante.
Debemos concluir, que comenzó la rapiña entre los Chavistas por ponerle la mano al poder parlamentario y regional, el MVR parece estar alzado con la nominación de candidatos para las venideras elecciones parlamentarias.
Los otros partidos que apoyán a Chavez, desesperados se han lanzado a la palestra pública a vociferar su desencanto y solicitar del presidente su mediación.
Asi estará el desencanto y el desorden entre las filas del chavismo, que han tenido que hacerlo por televisión para lograr que los escuche Chavez.
Es que acaso Lina no puede hablar directamente con el presidente ?, el mismo líder que escucha la voz del pueblo, pero no la de sus seguidores.
Los llamátivo de la escena de Lina Ron, es la fé ciega y la devoción con la cual parecen ver al presidente, como un todo poderoso que todo lo decide, incluso la voluntad popular.
La gente que apoya a Chavez, parece haber retrocedido a etapas superadas del caudillismo y de la devoción incuestionable al jefe. Lastimoso el mensaje de los líderes chavistas a un pueblo con vocación democrática.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario