sábado, diciembre 25, 2010

VENEZUELA EN MARCHA A UNA DICTADURA MILITAR Y COMUNISTA


El cardenal venezolano Jorge Urosa indicó este viernes que no tiene la menor duda de que el presidente Hugo Chávez se encamina hacia una dictadura de naturaleza comunista.
“Estamos avanzando hacia una dictadura, a mí no me queda la menor duda”, dijo Urosa durante una entrevista en el canal privado “Globovisión”.
Urosa reiteró que “el episcopado venezolano es absolutamente independiente tanto del oficialismo como de la oposición”
“Y en ese sentido el llamado que hago a quienes dirigen el Gobierno es que tengan en cuenta la responsabilidad grandísima que tendrán ante la Historia y ante Dios, si quieren imponer una dictadura totalitaria que ciertamente sería algo terrible para Venezuela”, expresó Urosa.
Previamente, el cardenal venezolano, único que tiene el país, consideró que Chávez está al frente de un “régimen comunista, porque el propio presidente lo dijo hace varios meses”.
Frente a esa percepción de la realidad política venezolana, Urosa rechazó que se utilice la violencia, “porque no es el camino y es totalmente dañina para el pueblo que la practica” y planteó una resistencia “pacífica, que no quiere decir pasiva”.
“No me corresponde a mi decir cómo debe articularse esa resistencia pacífica porque no soy un agente político”, aclaró el cardenal, que también es arzobispo de Caracas.
Además, Urosa manifestó que la principal referencia política que tienen que tener los venezolanos a la hora de actuar es la Constitución de 1999, que consagra los principios que hay que defender tales como “la libertad de conciencia y expresión y el derecho a la propiedad, que es algo innato”.
Urosa reiteró en varias ocasiones durante la entrevista que “el episcopado venezolano es absolutamente independiente tanto del oficialismo como de la oposición”.
“Trabajar por la paz es una obligación de todo venezolano”, para que podamos tener “una patria en la que todos podamos vivir bien”, concluyó.
El gobierno del presidente Chávez y la jerarquía católica han estado enfrascados en una permanente discordia incluso desde antes de que el gobernante fuera elegido en diciembre de 1998.