"La primera lección de Venezuela es que sin papeletas, no hay apelación en una elección disputada", dice Avi Rubin, profesor de ciencia de la informática de la Universidad Johns Hopkins. "
La segunda lección es que las papeletas son inútiles a menos que sean verificadas por los votantes y resguardadas de manera segura". Estas dos semanas han sido educativas. Presurosos, nos piden no hacer leña del árbol caído.
Con tanta prisa como la de Carter y Gaviria para convalidar el fraude, nos piden que vayamos a las regionales, insistiendo que no nos podemos dejar arrebatar los espacios conquistados. Que el 15 de agosto demostró que había "medio país" en la oposición (no el 60%).
Increíblemente, Pompeyo trata de convencernos de que vayamos a las regionales diciéndonos que en el Zulia "solo se perdió por uno por ciento", ¡como diciéndonos que esos fueron los resultados reales, que con un esfuercito adicional ahí podríamos llegar a ser mayoría, y que con esa mayoría podríamos ganar el estado!
Hablando duro, dicen que "exigen" que el CNE rectifique, que renuncien los rectores, que el proceso regional se haga a mano o contando todas las papeletas antes de transmitir la data por las smartmatic del diablo. Pero, ya tomaron la decisión de ir a las regionales, e insisten en que la "unidad" es más importante ahora que nunca.
Mientras tanto, Elías Santana ofrece talleres especiales para desestresarse, equivalente hoy de la bailoterapia de ayer. Estos son los mismos personajes de anteayer y de ayer, con los mismos vicios y la misma traición que trajeron al país a esta pesadilla en que no se sabe en quién creer.
Aprendiendo ahora de la táctica presidencial de huir hacia delante sin preocuparse de pequeñeces como la vergüenza y la verdad, los voceros principales de lo que era la Coordinadora Democrática intentan rescatarlo que queda de sus futuros políticos estirando al máximo sus artes de distracción y de malabarismo verbal. Un presidente norteamericano de principios del Siglo XX, Teodoro Roosevelt, tenía el lema de que había que hablar suave, pero cargar un garrote, porsiacaso.
Estos dirigencillos de AD, Copei y el MAS, principalmente, hacen lo contrario: hablan duro pero no cargan ni un palillo de dientes como para exigir respeto a lo que dicen. Algunos mal-pensados dicen que no tienen el garrote porque lo cambiaron por dólares. ¿INGENUIDAD, INEPTITUD O TRAICIÓN?
Lamentablemente para ellos, el 15 de agosto nos demostró cuán desnudos nos habían dejado estos elementos, los mismos que se habían cansado de decirnos que la votación y la victoria estaban blindadas. No solamente no lo estuvieron, sino que ni previeron la posibilidad de trampa, ni hubo plan de contingencia, y mucho menos un Plan B. Algunos de ellos son ingenuos, algunos ineptos, algunos traidores.
En un mundo político en que AD y Copei y el MAS se han cansado de batirse en duelos políticos que culminaban en votaciones reñidas, jamás Enrique Mendoza ni Ramos Allup ni Felipe Mujica habían llegado a unas elecciones sin tener planes de contingencia y planes B preparados para no dejarse robar los resultados.
¿Cómo es posible que hayan llegado al 15 de agosto sin previsiones, sin planes alternos, precisamente contra este régimen? ¿Cómo es posible que ni siquiera estuvieran pendientes de lo que pasaba con las auditorias en caliente, donde no solamente no apoyaron a los testigos de la Oposición, sino que ni siquiera mencionaron por tres días el hecho de que la gran mayoría de las auditorias no se habían podido llevar a cabo? ¿Ingenuidad? No. ¿Ineptitud? Quizás en algunos.
Pero, en estos tres en particular, y en otros como Quirós Corradi ?el garante principal de que las máquinas estaban "blindadas"?, esta falla no puede considerarse sino traición a la confianza otorgada. Todavía está por determinarse si esa traición fue o no con mala leche. Pero, mala o buena, estos personajes deben ser sumariamente descartados, junto con cualquier otro que haya asumido responsabilidades de dirección política y de seguridad electoral en el Revocatorio. Y, fíjate que no hemos siquiera mencionado la tolerancia demente que tuvieron durante todo el proceso previo al Revocatorio, tolerancia sin la cual el régimen no hubiera podido armar todo el entramado del fraude final.
¿CON QUIEN Y QUE? Ante la torta puesta por los líderes de la Coordinadora, es obligante echar un vistazo a aquellos que fueron sistemáticamente apartados por ese ultra-conservador cogollo, que giraba sospechosa e impenetrablemente en torno a los viejos elementos de AD, Copei, y el MAS.
Entre otras personalidades sistemáticamente castigadas y exiliadas de la Coordinadora porque tenían esperanza de una salida electoral y pacífica, pero no en las condiciones tan pobremente negociadas por Mujica y Quiróz, tenemos a Henrique Salas Römer, Rafael Alfonzo, Andrés Velásquez, Antonio Ledezma, Cipriano Heredia, el V/A Mario Iván Carratú y otras personalidades militares retiradas, así como Haydee Deutsch y Julio César Pineda, entre otros.
Y, entre aquellos que más firmeza mostraron en su discurso de que aquí no habría salida electoral, tenemos al Bloque Democrático en pleno, comenzando por Alejandro Peña Esclusa, así como personalidades como Oswaldo Alvarez Paz, Alberto Franceschi y otros.
El primer grupo, más heterogéneo que el segundo, solo está seguro de que se botó la bola antes de llegar al 15, y sospechan de la orfandad de ideas la madrugada del 16, y de la rapidez con la cual se pretende pasar la página del fraude para ir a las regionales.
Saben lo peligroso que será ir a estas elecciones con las mismas condiciones del referéndum, pero también entienden el peligro de no ir y de dejar sin contrincantes a los candidatos rojos. Pero, no quieren convalidar el fraude, por lo cual buscan fórmulas para o bien salir con éxito de estos comicios venideros, o bien deslegitimar de manera definitiva al régimen, sin que sea un simple suicidio. El segundo grupo insiste en que esto no se ha acabado, y que la salida va por el camino de la Resistencia Civil constitucional, instando a supuestos miembros dignos de la FAN a no permitir este despojo de la democracia.
Para ellos el camino es el 333 y 350, y la alternativa será la consolidación definitiva del castro-comunismo en el país, hasta el 2098. Entre algunos de estas personalidades hay más comunicación y entendimiento que entre otros. Necesitan más conversación y entendimiento, y harían bien en forjar un núcleo pequeño pero duro de patriotas incondicionales, entre los cuales están todos los que hemos mencionado.
Desde ese núcleo tendrían la tarea de forjar las grandes líneas estratégicas para la reconquista de la democracia, y de armar los equipos y mensajes necesarios para aglutinar alrededor de ellos a la gran masa venezolana, hoy huérfana de padre y madre. "GAVIRIA INDIGNO, AMBIGUO Y MENTIROSO"
El presidente intenta escoger nuestros líderes: primero desconoció a la coordinadora democrática, luego siguió los ataques contra Bush, y ahora insulta a Gaviria. Burdos intentos de que vayamos automáticamente a la defensa de tres de sus grandes cómplices en el secuestro de la voluntad del soberano. De los cómplices dentro de la Coordinadora Democrática, ya hablamos.
De Bush, basta saber que unos días antes del Referéndum su embajador Shapiro homenajeó al congresista norteamericano Cass Ballenger, en una fiesta en la cual las dos mesas principales fueron para altos jerarcas gringos y personalidades chavistas, mientras que las otras tres mesas fueron para personal subalterno de la embajada y personalidades de la oposición.
Shapiro ya sabía lo que venía, porque sabía que el departamento de estado había caído por la amenaza de Chávez de que si salía ardería Venezuela y su suministro petrolero, extraordinariamente inconveniente para la campaña de reelección de Bush, y que USA ?jugosas concesiones y contratos petroleros en el bolsillo de la Texaco-Chevron? ahora apostaba a que Chávez sería capaz de amansar a la oposición democrática después de doblegarla.
Y, sobre Gaviria, ahora pareciera haber un esfuerzo concertado para hacernos creer que el malo es Carter, pero que las "dudas" de Gaviria, su "honestidad" al relatar en su informe algunas de las barbaridades que tuvimos que sufrir los venezolanos para que nos permitieran llegar al matadero del 15, son indicio de que habría sido sorprendido en su buena fe. No, ninguna buena fe.
Gaviria no solamente calló para otorgar el fraude, sino que habló elocuentemente y se movió para defenderlo. Nos traicionó. Como todos los demás mensajes de estos días y de estos personajes, todo es espejos y humo y prestidigitación. Fríamente orquestado por Fidel, maestro de la desinformación y de la guerra sicológica, intentan ponerle otro acto al sainete, jugando con nuestra indignación, nuestra ingenuidad y nuestras pasiones, para que vayamos por los derroteros que ellos quieren y con quienes a ellos conviene.
Por John Salas
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